lunes, 1 de abril de 2013

¿Y el técnico en serio cuándo?

Lo que Banfield necesitaba era un técnico con caracter que supiera arreglar los problemas de vestuario y sacar adelante a un equipo caído en lo anímico.
Pero la inexperiencia de quienes toman las decisiones llevó a contratar a Matías Almeyda, desplazado recientemente de River justamente por su poca cintura para manejar situaciones extrafutbolísticas.
Entre varias cosas que dijeron sus ex dirigidos públicamente, las principales críticas apuntaron a su escasa ambición en los planteos tácticos, a su poco peso dentro del vestuario y a la falta de códigos en situaciones como las de Cavenaghi y el Chori Domínguez.
Si existía tanta felicidad por haber vendido tan bien a Ferreyra a Vélez, ahora esa plata ya no existe más. Entre la salida "de común acuerdo" que implica un pago no publicado a Garnero y el elevadísimo contrato de Almeyda, los dirigentes gastaron el 100% de ese ingreso en dos técnicos.
Hoy la sensación que ronda es la de una decisión de los dirigentes en su versión hinchas, por la pasión que Almeyda mostraba como fanático de River. Lejos parece quedar una lúcida e inteligente decisión en base a un proyecto que lleve a Banfield al ascenso esta temporada.
Las opiniones en las redes sociales no se hicieron esperar. Con respeto, pero a disgusto, la mayoría de los socios ya remarcó que no era lo que esperaban para este momento del Taladro. Mientras, desde el entorno de Julio Falcioni confirmaron que no hubo siquiera un llamado telefónico. ¿Cómo caerá Almeyda este miércoles cuando sea presentado oficialmente?