Si bien el torneo es larguísimo y bajones puede tener cualquier equipo, ver que empiezan a aparecer desorganizaciones graves desde lo táctico preocupan y mucho.
De la nada, Alejandro Barbaro saltó a la titularidad tal como había pasado con Delfino en el partido anterior. Cambios que parecen más apuestas desesperadas que modificaciones pensadas y con sentido.
Las emociones en Tucumán llegaron todas en la primera mitad, con Atlético poniendose en ventaja a los 30 por intermedio de Bustamante. Rápido, Banfield igualó gracias a Iván Pérez.
El segundo tiempo fue un ida y vuelta sin tantas ideas, dejando a las claras por la actitud que el punto tan mal al equipo de Garnero no le venía.
